martes, 3 de junio de 2014

RECORDAR Y NO OLVIDAR EL PASADO

¿Por qué Uribe no puede con la paz?.
Por María Jimena Duzán

 La última razón es que no veo a las FARC sentándose a la mesa con Uribe ni con su candidato. No lo hicieron cuando los buscó insistentemente durante su mandato, –historia que Uribe insiste en negar–, menos lo van a hacer ahora cuando está cegado por la sed de venganza. Solo agregaría esta impresión que me han dejado los frecuentes viajes que he hecho a La Habana a cubrir el proceso de paz: que a diferencia de lo que pasa con el uribismo, he visto cómo las FARC también han empezado a dejar de odiar para pensar en la paz. 


Muchos colombianos sienten desgano y desencanto para esta segunda vuelta y están tentados a quedarse en la casa el 15 de junio o a votar en blanco, pues ninguno de los dos candidatos los seduce. Entiendo ese sentimiento pues en la primera vuelta no voté por ninguno de ellos, por su insensibilidad frente a la igualdad. Pero Santos y Zuluaga no son para nada iguales y esta elección es crucial y no rutinaria. Siento entonces que no tengo derecho al desencanto y debo participar. Y que un voto en blanco no ayuda a evitar el retorno del uribismo. Y por ello votaré por Santos, por la defensa del Estado de derecho y con la esperanza de una paz negociada.

http://www.elespectador.com/opinion/sin-derecho-al-desencanto-columna-495801